Existe un extenso ecosistema que gira alrededor de las aplicaciones; múltiples estudios han demostrado que las personas pasan más tiempo en las aplicaciones que en cualquier otra actividad en los teléfonos inteligentes. No es muy difícil concluir que, este es un medio que cuenta con grandes oportunidades de negocio.
El método más fácil y el más popular es el uso de publicidad en la aplicación. Es. Ofrecer la descarga de la App gratuitamente como plataforma de difusión de publicidad, aunque el éxito de este modelo está determinado por la cantidad de descargas que alcance. Y para logar ese objetivo la experiencia del usuario, la publicidad no debe ser intrusiva, para que las recomendaciones de los usuarios de sean positivas.
Este es un modelo en el que la descarga de la App es gratuita, sin embargo, para acceder a la aplicación en forma óptima se debe pagar, por ejemplo, la opción de eliminar anuncios al convertirse en usuario Premium. Una vez más la visibilidad y popularidad de la aplicación es esencial para alcanzar los niveles deseados de monetización. Este es un sistema similar al Freemium, aunque, la diferencia esencial, es el tiempo condicionado para adquirir la App.
Es más probable que las personas paguen por cualquier aplicación que les brinde la funcionalidad que necesitan. Además, si presta atención a los datos de fallos y las métricas de uso y se utiliza esta información para ofrecer mejoras, será realmente fácil monetizar su aplicación.
Este es un modelo que depende exclusivamente de la popularidad de la App, y explora la expansión y crecimiento de la misma. EN este método la App es ya reconocida entre los usuarios y se ha convertido una “marca reconocida”, aquí es donde entra la estrategia de ‘brandear’ el contenido, es decir unirse a otra marca más fuerte y unir imágenes o estilos.
Por ejemplo, vestir personajes de princesas o de juguetes de temporada.
Muchos desarrolladores han adoptado este enfoque y han alcanzado gran exitoso.
La idea es una propuesta básica, pero de máxima usabilidad y estabilidad. Un ejemplo de esta estrategia es WhatsApp, un chat básico pero ejecutado realmente bien. Una aplicación que es simple pero altamente funcional y tiene un gran diseño se puede monetizar fácilmente.
Existen muchas otras estrategias innovadoras en las que día a día están trabajando las marcas y desarrolladores, ya que, aunque las Apps aparecieron hace 10 años, queda mucho por ver y explorar y monetizar en ese terreno.
¿Quieres saber más?, Contáctanos: contacto@isol.mx.