La IA llega al comercio minorista: 3 x 3
3 beneficios y 3 pasos a seguir
La IA va a la par con las crecientes tasas de crecimiento del comercio electrónico aceleradas por la pandemia, provocando que la adopción de la IA sea aún más urgente en el comercio minorista. Las ventajas obtenidas a través de la inteligencia artificial transformarán el sector. Esto significa que los minoristas deben comenzar a planificar ahora. Y esos planes deben estar a nivel de estrategia empresarial, no solo de tecnología.
Muchas empresas ven el valor de la IA, pero existen barreras importantes, por ejemplo, escasez de talento, empleados que carecen de habilidades, infraestructura de IT inadecuada, estrategias confusas para la comercialización e implementación.
El desafío para los minoristas es usar esas capacidades de manera efectiva y asegurarse de que sus organizaciones estén a la altura de la tarea.
Para hacer un mejor uso de la IA, los minoristas necesitarán una estrategia eficaz que incluya:
- Un análisis de referencia de la fuerza laboral que identifique actividades clave y determine cuáles pueden automatizarse y cuáles deben ser respaldadas o mejoradas por IA.
- Enfoque continuo en usos de alto valor para garantizar que la prioridad más alta se asigne a las oportunidades de inteligencia artificial que abordan las necesidades críticas del cliente y los puntos débiles, para crear experiencias excelentes para el cliente o que mejoren los flujos de trabajo.
- Establecer cronogramas realistas, ponderando las oportunidades prácticas a corto plazo sobre los grandes proyectos.
Hay tres beneficios que ofrece la IA al comercio minorista:
- Costos menores de operación. La IA transforma la fuerza laboral, si bien las tareas rutinarias seguramente se automatizarán, la IA también respaldará y mejorará el trabajo cada vez más exigente. Ayudará a optimizar la programación laboral, el seguimiento de entregas y la planificación de rutas de entregas, entre otras tareas.
- Promoción y merchandising más efectivos. La IA impulsará la planificación del marketing, lo que ayudará a segmentar a los clientes, competencia y ejecutar programas publicitarios específicos. Por ejemplo, tiendas departamentales ya están usando IA para escanear las ofertas de la competencia y, en un futuro cercano, esperan usar la robótica para escanear los propios estantes para optimizar la variedad de sus productos.
- Experiencia a cliente mejorada. Los empleados de la tienda pueden usar dispositivos móviles habilitados para IA para ayudar con las ventas y, por lo tanto, generar tasas de conversión y valores de pedidos más altos. Por ejemplo, se utilizan datos sobre los tipos de clientes para hacer recomendaciones personalizadas en tienda.
Existe una gran ventaja, los márgenes minoristas son pequeños: esto significa que cualquier costo o ventaja ofertada al cliente puede cambiar las reglas del juego. Por ejemplo, si la inteligencia artificial facilita a los consumidores a encontrar lo que buscan en línea, el modelo tradicional de búsqueda se verá interrumpido. En cambio, una herramienta de inteligencia artificial se convierte en el compañero de compras del consumidor, generando una mayor conversión a un costo menor, al sugerir más productos afines a las necesidades del cliente.
Los minoristas que hacen planes sobre IA deben recordar que las leyes económicas fundamentales no han cambiado. La estrategia tecnológica debe comenzar con las necesidades del usuario y un caso sólido para el retorno de la inversión. Además, cambiar la tecnología es más fácil que cambiar la forma de trabajar de las personas. Para tener éxito, es necesario hacer ambas cosas, y recordar que cambiar el comportamiento lleva tiempo. Sin embargo, para las empresas que hacen bien la IA, existe la posibilidad de un futuro mejor.
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